SU MINISTERIO

He aquí lo que él hacía mientras estuvo aquí en la tierra (Mateo 9: 35-38)
Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha y los obreros pocos, rogad al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.
Dicho esto, Jesús separó a doce de ellos y les dio autoridad sobre toda fuerza del maligno, para que echaran fuera los espíritus inmundos, y sanar toda enfermedad y toda dolencia. A estos doce envió Jesús y les dio instrucciones. Y yendo predicad diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, echad fuera demonios, resucitad muertos, de gracia recibisteis, dad de gracia.( Mateo 10: 1-8)

Algunos años después, dijo el apóstol Pedro, predicando en casa de Cornelio el centurión: “Como Dios ungió con el Espíritu Santo y poder a Jesús de Nazaret, y como este anduvo haciendo bienes, y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él. Y nosotros somos testigos de todas las cosas que Jesús hizo en Jerusalén y en toda Judea, a quien mataron colgándole en un madero. A este resucitó Dios al tercer día e hizo que se manifieste, no a todo el pueblo, sino a los testigos que Dios había ordenado de ante mano, es a saber, a nosotros que comimos y bebimos con él después de la resurrección. Y nos mandó que predicásemos al pueblo, y testificásemos que él es el que Dios ha puesto por juez de vivos y muertos. De este dan testimonio todos los profetas, que todos los que en él creyeren, recibirán perdón de pecados por su nombre” ( Hechos 10: 38-43)
En conclusión diremos que Jesús inició su ministerio, y preparó un grupo de hombres, para que continuaran con la obra que él había iniciado. Les dio autoridad y los envió, ellos eran muy concientes de la magna tarea que les esperaba. Persecución, cárceles y muerte fue el destino de muchos de ellos, pero, ¡que obra hicieron! En menos de cincuenta años habían llenado el mundo conocido con el evangelio de la salvación. Los templos de los paganos quedaron vacíos, Tertuliano el apologista en el segundo siglo, dijo: Somos de ayer y ya hemos vaciado vuestros templos, dirigiéndose a los paganos, adoradores de estatuas muertas fabricadas por el hombre.

Como ya hemos dicho anteriormente, queremos hacer conocer la doctrina que sustentamos los que creemos en Cristo, como nuestro Señor y Salvador. Para que puedan saber lo que sus hijos recibirán como enseñanza
Si los envían, o les hacen conocer lo que vertemos aquí, en este Blog.


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